La palabra anime (アニメ?) fue tomada en Japón para nombrar
a un estilo de animación, surgido en ese país. Es el término que identifica a
la animación de procedencia japonesa. Su origen es discutido, se cree que el
término anime proviene de la abreviación de la transcripción japonesa de la
palabra inglesa animation (アニメーション [animēshon]). De ahí que se
abrevie a «anime». Por otra parte se cree que es una palabra de origen francés.
El anime es un medio de gran expansión en Japón, siendo al mismo tiempo un
producto de entretenimiento comercial y cultural, lo que ha ocasionado un
fenómeno cultural en masas populares y una forma de arte tecnológico. Es
potencialmente dirigido a todos los públicos, desde niños, adolescentes,
adultos, hasta especializaciones de clasificación esencialmente tomada de la
existente para el "manga" (historieta japonesa), con clases base
diseñadas para especificaciones socio-demográficos tales como empleados, amas
de casa, estudiantes, etc. Por lo tanto, pueden hacer frente a los sujetos,
temas y géneros tan diversos como el amor, aventura, ciencia ficción, cuentos
infantiles, literatura, deportes, horror, fantasía, erotismo y muchos otros.
El anime tradicionalmente es dibujado a mano, pero
actualmente se ha vuelto común la animación en computadora. Sus guiones
incluyen gran parte de los géneros de ficción y son transmitidos a través de
medios cinematográficos (transmisión por televisión, distribución en formatos
de video doméstico y películas con audio).[cita requerida] La relación del
anime japonés con el manga es estrecha, pues históricamente una gran cantidad
de series y trabajos de anime se basan en historias de manga populares. Además,
también guarda estrecha relación con las novelas visuales.
Entre los rasgos características de los personajes de anime
encontramos el tamaño de los ojos, sus finas narices y bocas, su muy particular
cabello y sus cuerpos así como la expresividad de los personajes y el hecho de
tener un actitud definida que los hace casi reales a otro contexto